Impulsados por el Espíritu Santo

Ciertamente les aseguro que si el grano de trigo no cae en tierra y muere, se queda solo. Pero si muere, produce mucho fruto. El que se apega a su vida la pierde; en cambio, el que aborrece su vida en este mundo, la conserva para la vida eterna Juan 12:24-25

Si quieres ser impulsado por el Espíritu Santo primero tienes que estar rendido a él, tienes que morir a ti mismo para llevar fruto, es la única forma en la que el Espíritu Santo puede comenzar a utilizar tu vida con poder y afectar a aquellos que te rodean.

Vivimos en una sociedad egoísta que solo se preocupa por sí mismo, especialmente orientada a nuestro ego y el consumismo desenfrenado de cosas que no tienen ningún valor en el Reino de Dios, esto hace que nosotros estemos totalmente distraídos y cada vez más distantes del corazón de Dios. Hoy en día ya no se predica el mensaje de “Toma tu Cruz y Sígueme” son muy pocos los lugares donde lo podemos escuchar, lo han remplazado por entretenimiento religioso y mensajes psicológicos que no producen un cambio en las personas, porque no están impulsados por el poder del Espíritu Santo.

Las turbinas eólicas necesitan del viento para poder generar la electricidad, imagínate a ti mismo como una turbina eólica que genera la electricidad a través del viento que hace mover las aspas, si permites que el Espíritu Santo se mueva en tu vida, El generara el poder necesario para poder suministrarle a otras personas la luz de Cristo.

Si quieres que Dios comience usar tu vida tienes que rendirte completamente a él, tienes que tomar la cruz (Morir a ti mismo) y seguirle no hay otra forma de que Él pueda llevar fruto en tu vida, no hay otra forma que su espíritu pueda fluir a través de ti y alcanzar otras personas no hay otra forma de que puedas afectar la sociedad que te rodea.

El Espíritu Santo vive en ti, deja que el comience a tomar el control de tu corazón más y más y veras como el impulsara tu vida a otro nivel.